Guinea Ecuatorial: En estado grave el joven tiroteado por miembro de la seguridad

Tras someterse a una segunda difícil operación quirúrgica, se encuentra en estado crítico en el Hospital La Paz de Sipopo, Malabo, Francisco Ondo Esono de 22 años de edad, más conocido como Fran o Nobelio. El joven es una víctima más de la arbitrariedad y la prepotencia con que algunos miembros de las fuerzas de seguridad tratan a los ciudadanos de Guinea Ecuatorial.

Francisco Ondo Esono, Nobelio

Según narraron los testigos, el viernes 12 de Julio sobre las 11 de la mañana, Nobelio de camino a su casa con unos amigos, se encontró con una joven con la que intercambió una palabras. Visto lo cual Pedro miembro de la Seguridad del General de División, Juvenal Mbomio Nsue, y al parecer pareja sentimental de la muchacha,le exige a Nobelio explicaciones acusándolo de ser su amante y le propina un bofetón. Acto seguido, el agente de la seguridad (Pedro), se dirige a su coche regresando con un arma y sin mediar más palabras le dispara a bocajarro al joven causándole heridas de extrema gravedad.

Nobelio fue traslado al Hospital La Paz de Sipopo donde se le han intentado reconstruir los órganos vitales que habían sido afectados por la bala. Los médicos afirman que si sobrevive, jamas volverá a tener una vida normal por los daños sufridos en una arteria, el hígado, páncreas, estómago e intestinos.

Según el www.diarionrombe.es, los jóvenes cercanos a la víctima se pronuncian sobre el caso : “Estamos indignados, hoy es un día triste y varios amigos están rezando hasta que salga del hospital y esperemos que no le pase nada porque responderemos. Lo que si esta claro es que a la próxima  moriremos como héroes luchando por nuestras libertades que morir como gallinas y reduciendo nuestra población poco a poco como lo están haciendo” afirma un joven indignado: "Sólo queremos paz, trabajo, reparto equitativo de la riqueza, mas libertades: Queremos que el ejercito haga su trabajo que es defender a la población y no reducirla que solo somos un millón de habitantes".

Con demasiada frecuencia los ciudadanos de Guinea Ecuatorial tienen que sufrir que los miembros de las Fuerzas de Seguridad del Estado, policía, ejército, prominentes políticos e inclusos sus hijos, hagan un uso indebido de sus armas de modo intimidatorio y temerario. En esta ocasión, Pedro, el agresor, se encuentra detenido a la espera de juicio. Se especula que según se desarrollen los acontecimientos podría ser acusado de asesinato y enfrentar la pena capital.